Las transacciones que se planifican y llevan a cabo a través de fronteras internacionales para alcanzar los objetivos de personas, empresas y organizaciones se denominan negocios internacionales. La exportación, la importación y la inversión extranjera directa son las categorías clave. La concesión de licencias, las franquicias y los acuerdos de gestión son otras formas de comercio internacional.
La globalización es un factor importante a tener en cuenta en el mundo en este tipo de negocios porque beneficia al comercio de bienes y servicios, a los flujos de capital e inversión directa y a la movilidad humana, sobre todo en las naciones con acuerdos de libre comercio. Las diferencias entre las monedas de los países, las estructuras fiscales, los sistemas jurídicos e incluso las culturas, que implican una variedad de costumbres, tradiciones y distintas formas de negociar acuerdos, hacen que el comercio internacional sea más complejo que la empresa nacional.
Componentes
Los negocios internacionales tienen dos componentes principales:
- Comercio exterior
Se trata concretamente de las leyes y normativas nacionales que rigen la gestión del comercio internacional. Se refiere a los términos, formatos y sustancia del intercambio de mercancías y servicios.
- Comercio internacional
Esta expresión se refiere a todas las actividades comerciales internacionales, incluidas las importaciones y exportaciones, las inversiones directas, la financiación internacional, la comercialización, etc., en las que participan las distintas comunidades nacionales.
Objetivos
- Expansión de las ventas
Las ventas se basan en el grado de interés de los clientes por los bienes y servicios de una empresa, así como en sus ganas y capacidad para realizar una compra. Las empresas pueden ampliar su potencial de mercado buscando mercados extranjeros porque en todo el mundo hay más gente y con más poder adquisitivo que en una sola nación.
- Obtención de recursos
Los proveedores y fabricantes buscan servicios, productos y componentes hechos en el extranjero. También buscan fuentes extranjeras de dinero, tecnología e información que puedan utilizar en casa, a veces para ahorrar gastos y otras para comprar bienes que no están fácilmente disponibles allí. Aunque en un principio una empresa puede utilizar recursos nacionales para desarrollarse internacionalmente, una vez que empieza a hacer negocios en el extranjero, puede emplear recursos extranjeros -como financiación o conocimientos- para mejorar sus operaciones nacionales.
- Minimización de riesgos
Las empresas deben buscar mercados en el extranjero para aprovechar las variaciones de los ciclos económicos (recesiones y expansiones) que se producen entre países y reducir así las oscilaciones de las ventas y los beneficios. Muchas empresas se dedican al comercio internacional con fines defensivos porque quieren compensar las ventajas que puedan obtener sus rivales en los mercados extranjeros y que puedan perjudicarlas a nivel nacional.
